Debido al conflicto entre Rusia y Ucrania, el Fondo Monetario Internacional (FMI) contempla una rebaja del Producto Interior Bruto (PIB) de España de un punto porcentual.
De este modo, la cifra que sale reflejada en la edición de abril del informe “Perspectiva Económica Mundial” es 4,8 % para 2022. A pesar de la baja en la previsión del crecimiento, el presidente Pedro Sánchez aseguró que el crecimiento de la economía española seguirá siendo “robusto”.
Para 2021, el PIB español creció un 5,1% y se esperaba que este año el aumento fuese mayor, pero ocurrió la invasión rusa a Ucrania. Igualmente, a raíz del conflicto, el FMI redujo en medio punto porcentual el crecimiento económico de España en 2023, hasta el 3,3 %.
Los ajustes para España están por debajo de los registrados por el resto de grandes economías de la eurozona. El FMI proyectó para Alemania un aumento del 2,1 % de su PIB (1,7 puntos menos). Por su parte, calculó para Italia un crecimiento del 2,3% (1,5 puntos menos) y para Francia, uno del 2,9 % (seis décimas menos).
En cuanto al crecimiento en 2023, la entidad financiera estima que el PIB alemán aumentará hasta el 2,7 %, dos décimas más de lo calculado inicialmente. En cambio, recortó en medio punto el de Italia, hasta el 1,7%. Igualmente, redujo en cuatro décimas el francés, hasta el 1,4%.
Las otras proyecciones del FMI para la economía española
Respecto al resto de datos macro publicados por el FMI, el organismo estima que la inflación en España será del 5,3 % este año. Asimismo, calcula que se ralentizará al 1,3 % en 2023.
Por otro lado, el paro se reducirá en 1,4 puntos porcentuales durante este año, hasta el 13,4 %. Un escenario optimista, pues el FMI estimaba que no se alcanzaría esa cifra hasta que pasara el año 2026. Ya para 2023 el organismo estima que el paro será del 13,1%.
Guerra en Ucrania afecta también la previsión de crecimiento mundial
El FMI espera que el PIB mundial crecerá este año y el siguiente un 3,6%. Esto supone una rebaja de ocho décimas respecto de la previsión de enero para 2022. Igualmente, es una baja de dos décimas en la cifra que se había proyectado para 2023.
“Los efectos económicos de la guerra se están extendiendo por todas partes, como ondas sísmicas que emanan del epicentro de un terremoto, principalmente a través de los mercados de productos básicos, el comercio y los vínculos financieros”, señala el economista jefe del FMI, Pierre-Olivier Gourinchas, en el informe.
Según el organismo, la guerra en Ucrania amplifica el impacto de la inflación y las interrupciones del suministro. Dichos factores habían llevado a los bancos centrales a endurecer la política monetaria. También incrementó las tasas de interés y la volatilidad de los precios de los activos.
“La inflación se ha convertido en un peligro claro y presente para muchos países y las interrupciones relacionadas con la guerra amplifican esas presiones. Ahora proyectamos que permanecerá elevada por mucho más tiempo”, advirtió. Para 2022 anticipa que llegará hasta el 5,7% en las economías avanzadas y el 8,7% en los mercados emergentes.