La recuperación de las economías desarrolladas del mundo y muchas emergentes fue posible en 2021, gracias a la vacunación masiva, los estímulos monetarios y las tasas de interés cercanas a cero.
Hasta ahora, se han administrado alrededor de 9,000 millones de dosis de vacunas contra el coronavirus. Aunque no ha sido suficiente para frenar el avance de las variantes del covid-19 (Delta y Ómicron), han servido para que los países poco a poco vayan normalizando su vida.
Todo esto hizo posible que los mercados de valores en el mundo entero subieran por tercer año consecutivo y que el mercado de bonos se hundiera. Pero también las economías emergentes y otras productoras de materias primas, se recuperaron debido a los altos precios de los commodities.
La mayor tasa de crecimiento anterior a la pandemia
El índice global del mercado de valores MSCI, en el que están incluidas las economías emergentes y los mercados de las naciones desarrolladas, ha tenido un crecimiento de 14%. Esta es la mayor tasa de crecimiento desde 2019, previo a la pandemia.
Sin embargo, los mercados de las economías desarrolladas han tenido un mejor desempeño. Durante el año registraron un aumento de 17%, según lo indica el índice de mercados desarrollados de MSCI.
Por otro lado, en los Estados Unidos el índice NYSE Arca Petróleo, donde se incluyen las compañías de exploración, producción y desarrollo del crudo, vio su mejor año al incrementarse en un 50%, aproximadamente.
El desempeño de las acciones de este sector son, de alguna manera, una suerte de reivindicación a la inversión en energía, según indicó Bloomberg. Estos fondos están apostando a la capacidad de las empresas energéticas para compensar las tendencias de los inversionistas.
Las preferencias de los inversionistas vienen cambiando y los fondos están ofreciendo mejores recompensas por su dinero. A través de aumentos en los dividendos y agresivos programas de recompra de acciones para disminuir su deuda, mientras las acciones estuvieron bajas y los precios de las materias primas aumentaban.
Índices de EE. UU cierran alto
Los principales índices financieros Dow Jones, el S&P 500 y el Nasdaq finalizaron el año con aumentos de 16%, 25% y 20%. El Estratega Global de eToro, Ben Laidler, comentó que “la renta variable estadounidense registró un tercer año consecutivo de rendimientos de dos dígitos, lo cual sólo ha sucedido tres veces en la historia”.
Las acciones europeas, por otra parte, junto con los bancos europeos tuvieron su mejor año en la última década. El alza fue de un 33%. Así mismo, el índice bursátil de Londres, FTSE, y el DAX de Alemania experimentaron un alza de 14%. El CAC de Francia subió 27% y el Ibex español 5%.
Respecto a los mercados emergentes, las expectativas de los inversionistas fueron muy altas a principios de 2021. No obstante, la realidad estuvo bastante lejos de las proyecciones. La reincidencia del coronavirus en las naciones con mercados emergentes hizo retroceder el índice MSCI en un 7% durante el año.
Las acciones chinas se desplomaron
Las acciones de las empresas tecnológicas chinas que cotizan en Hong Kong, sufrieron un desplome de un 30% . La caída estuvo directamente relacionada con las medidas adoptadas por el gobierno de Beijing para limitar su influencia.
Una de las más golpeadas fue Alibaba. La acción del gigante asiático del comercio electrónico cayó casi un 50%. El índice de las acciones chinas que cotizan en la bolsa de EE. UU, Nasdaq Golden Dragon, se desplomó cerca de un 40% .
Según Laidler, “China se vio afectada por una represión tecnológica regulatoria continúa con la nueva política de ‘prosperidad común’ de las autoridades”.
En los mercados de América Latina, el índice Merval de Argentina se hundió más de 60%. El Bovespa de Brasil cayó un 12%, en tanto que el S&P/BMV mexicano logró un alza de 19%, lo que representa el mejor desempeño de las acciones desde 2010.